El conflicto del transporte público de las provincias se recrudeció: la Unión Tranviarios Automotor (UTA) nacional dio un plazo de 48 horas para que las empresas igualen el incremento salarial de las paritarias de los choferes porteños, que recibieron el 37%. Si no hay resultados, anunciaron que tomarán medidas de fuerza. Por el mismo reclamo, la semana pasada hubo un paro de choferes de dos días que dejó sin transporte público a 22 de los 24 distritos del país. Sólo hubo servicio normal en la ciudad de Buenos Aires y el conurbano.
“Luego de una nueva audiencia sin resultados en el Ministerio de Trabajo de la Nación, no nos han dado ninguna respuesta a los pedidos salariales, como tampoco a estar incluidos en un plan de vacunación contra la covid-19”, manifestó Roberto Fernández, titular de UTA nacional. “Exigimos una reunión urgente con las autoridades de los ministerios de Interior, Transporte, Trabajo y la Jefatura de Gabinete de Ministros. De no obtener respuestas en las próximas 48 horas (es decir, hasta mañana), dispondremos medidas de acción gremial para que el reclamo sea escuchado y resuelto”, finalizó.
Los empresarios de las provincias, nucleados en la Federación Argentina de Transporte Automotor de Pasajeros (Fatap) culparon al Gobierno nacional por el conflicto: en AMBA, el Poder Ejecutivo Nacional elevó los subsidios nacionales al transporte para cubrir el aumento salarial para los choferes porteños. Pero -hasta ahora- no otorgará esos fondos para cubrir la suba de los trabajadores del interior. “Prueba irrefutable de la discriminación que sufre el sistema de transporte del interior del país son los datos públicos y verificables que muestran que mientras el AMBA cuenta con 18.000 unidades en servicio y 47.000 trabajadores, recibe $ 16.000 millones en subsidios nacionales mensuales. El interior del país, en cambio, con 13.000 unidades y 30.000 trabajadores, percibe únicamente $ 1.500 millones por mes. Mientras los usuarios del AMBA pagan $ 18 de boleto, el promedio del boleto en el interior es de $ 37”, plantearon desde la federación de empresarios. “Así, están en riesgo más de 30.000 trabajadores directos”, agregaron.
LA GACETA accedió al acta de la reunión de ayer entre empresarios, dirigentes sindicales y funcionarios nacionales. También participaron los tucumanos Benjamín Nieva (secretario de Transporte y Seguridad Vial del Poder Ejecutivo) y Rodolfo Ocaranza (secretario de Gobierno de San Miguel de Tucumán). “Reiteramos una vez más que pretendemos el mismo tratamiento que se les ha dado a los trabajadores del Área Metropolitana de Buenos Aires. Exigiremos el mismo compromiso tanto de las empresas como de autoridades nacionales y provinciales”, fue la manifestación de las autoridades de UTA nacional en el encuentro.
Los empresarios insistieron en que también necesitan el mismo auxilio nacional que las firmas porteñas.